A partir de hoy me declaro partidaria de vivir el presente, el día a día. Como si fuera un regalo. Porque al fin y al cabo eso es lo que es, un regalo.
¿Cuantos de los que leéis mis textos vivís anclados en el pasado? ¿Y cuantos vivís pensando en que pasará mañana, la semana que viene o dentro de cinco meses?
¿¡Muchos os veis ahí verdad!? En otro imbécil más que no vive lo que le pasa cada día, y eso es un gran error.
El tiempo no se puede comprar, nunca vuelve. Por eso hay que vivir el presente.
Nadie dijo que vivir fuera a valer la pena, que todo fueran maravillas, dinero, amor, trabajo, coches y una casa de campo. Solo nos dijeron que vida había una, y que había muchas cosas que esperaban ser descubiertas ahí fuera por nosotros, y cada uno tenía que buscar algo por lo que dejar huella en este mundo.






Perdón por no haber subido nada, estaba de exámenes, pero ahora intentaré volver a poner la mente en marcha y escribir un poquito cada día.